¿Qué provocan y cómo tratarlas?
Las reacciones alérgicas provocadas por alimentos son cada vez más frecuentes y en los últimos años se ha evidenciado un aumento significativo, probablemente asociadas a los cambios en el estilo de vida. Sin embargo, un buen diagnóstico a tiempo, su correspondiente tratamiento y la investigación en este campo ayuda notablemente el día a día de las personas que las sufren en mayor o menor medida.
¿Qué es una alergia alimentaria?
Es el conjunto de reacciones adversas mediadas por mecanismos inmunológicos tras el consumo de alimentos. La más conocida de las alergias alimentarias es la alergia IgE mediada, que consiste en que cuando ingerimos, inhalamos o entramos en contacto con el alimento al que somos alérgicos, la proteína de ese alimento reconocida por el sistema inmune se desencadena de forma inmediata o en menos de 2 horas en forma de ronchas, hinchazón o incluso, una anafilaxia; es decir, una reacción alérgica generalizada grave, de inicio rápido y que puede causar la muerte.
¿Cuáles son las principales causas de alergia alimentaria? Depende de la edad. Por ejemplo, en niños menores de dos años lo más frecuente es a la leche y al huevo. Sin embargo, en adultos en España es LTP (proteínas transportadoras de lípidos), frutos secos y mariscos.
¿Se dan más casos en la infancia o en la vida adulta?
Las alergias alimentarias que se desarrollan de adultos suelen ser de perfil más leve tipo alergia a la proteína profilina (presente en frutas, suele dar picor de boca). En niños las alergias a pesar de que algunas se superan con la edad, suelen producir reacciones más graves tipo anafilaxia.
¿Cómo puede detectarse y cuáles son los principales síntomas?
Los síntomas típicos son urticaria, ronchas, habones en la piel, angioedema, dolor abdominal, hinchazón de labios, de párpados, dificultad para tragar, respirar, mucosidad, vómitos, diarrea… Normalmente suelen producirse varios de estos síntomas a la vez, de forma inmediata o en menos de 2 horas cada vez que consumimos el alimento al que somos alérgicos.
¿Qué tipo de reacciones provoca y cuál es la más frecuente? Las alergias alimentarias pueden causar reacciones leves, como el síndrome de alergia oral, que es simplemente picor en la boca. Ésa es la más frecuente en adultos, pero en niños es más habitual la anafilaxia o urticaria.
¿Qué se debe hacer en ese momento?
Lo primero hay que ver qué tipo de reacción es. Si es una urticaria, solo hay un órgano afectado y actuaremos primero dando antihistamínicos. Si es una urticaria generalizada o existe angioderma, añadiremos un corticoide y ya, si es una anafilaxia, es decir, que se afectan dos o más órganos (piel más respiratorio, o piel más digestivo), utilizaremos directamente la adrenalina intramuscular. Estos son unos dispositivos que vienen precargados y son pautados por el alergólogo, el médico de cabecera o el médico de urgencias por si hay una reacción grave, puesto que hay que tratarla de manera inmediata y urgente.
Ahora que se acercan las Navidades y se come más fuera de casa, ¿Qué recomienda en estos casos?
Es muy importante comentar en el restaurante a qué se es alérgico para que en la medida de lo posible ellos eviten la contaminación cruzada, las trazas o darnos una receta que pueda llevar el alimento al que somos alérgicos. Igualmente, tenemos que prestar mucha atención a la hora de elegir el menú. Hay que evitar escoger platos muy elaborados que mezclen muchos ingredientes y, por supuesto, siempre llevar con nosotros el tratamiento.
Es cierto que cada vez más la Hostelería indica en sus platos aquellos alimentos que pueden causar alergia. Efectivamente y es realmente maravilloso. La carta de alérgenos es algo totalmente positivo para los pacientes que presentan alguna alergia alimentaria. No obstante, a veces, la contaminación cruzada puede provocar alguna reacción sin querer; por ejemplo, que se cocine un alimento para un alérgico a los frutos secos al lado de un postre que los contiene. Sin duda, depende del nivel de sensibilidad del paciente y de la cantidad de alimento que lleve tendrá una reacción más o menos grave.
¿Cuáles son los principales alérgenos hoy día?
A nivel europeo son la leche, el huevo, el trigo, la soja, el cacahuete, los frutos secos, el pescado y el marisco. A nivel español en niños es más frecuente la leche y el huevo; en adultos, los frutos secos y el marisco.
¿Se puede tratar una alergia de este tipo?
Así es. A corto plazo existe el tratamiento para revertir esa reacción, que es con antihistamínico, corticoide y si es una anafilaxia, adrenalina. Y a medio plazo es importante acudir al alergólogo para ver qué alimentos debo evitar y en qué cantidad o cómo podría tomarlos, puesto que según cómo sea la alergia del paciente, puede ingerir el alimento cocinado pero no crudo, tomar pequeñas cantidad o no tolerar ninguna traza. No obstante, el consejo número uno es evitar el alérgeno.
¿Cuál es la tendencia actual en este ámbito? Actualmente la tendencia es el concepto de alergia diagnosticada, alergia tratada; que se está manejando mediante la inmunoterapia oral con alimentos para revertir la alergia. Existen varias fórmulas y la más habitual es la aplicada con leche y huevo en niños pequeños, ya aprobada en España. En Estados Unidos, Reino Unido y algunos países de la Unión Europea también está permitida con cacahuete y en adultos tenemos disponible una vacuna sublingual de LTP desde hace varios años. Es verdad que se están haciendo muchos avances en la investigación para realizar inmunoterapias con otros alimentos, como el desarrollado en Israel con frutos secos y que tiene estudios bastante prometedores.
¿Qué recomendaciones daría a una persona con alergia alimentaria?
Le recomendaría evitar estrictamente el alérgeno sospechoso, le educaría sobre cómo reconocer una reacción alérgica y qué medicamentos usar en función de la reacción que tuviera, así como realizar un estudio en profundidad para conocer exactamente el alimento que le ha producido la reacción, qué alimentos pueden que le desencadenen o no otras reacciones actualmente o en el futuro y darle la opción de realizar una inmunoterapia oral para que se le pueda eliminar o no esa alergia.